HAZ UNA PRESENTACIÓN DE CINE (Vivir Rodando, y 3)

 En los artículos previos de esta serie vimos cómo puede ayudarte la técnica del cine a preparar los contenidos y los visuales de tu presentación. Veamos hoy, en el último capítulo de la serie, cómo preparar una presentación “de cine”. PREPARARSE ES… PREPARARSE.

Si eres seguidor de este blog (y si no lo eres, ya estás tardando) sabrás que si hay un tema sobre el que no me canso de insistir son los ensayos. UN SOLO ENSAYO marca una enorme diferencia en los resultados. Y no hay resultados sin una buena preparación.

"The Big Picture": verifica todo el recorrido. Foto: Paco Cepas.

En el cine, se ensaya. Los ensayos son diferentes a los que hacemos en el teatro, pero son necesarios. Precisamente por eso, por las diferencias con los ensayos teatrales, creo que los ensayos de ese estilo serán más interesantes de cara a tu presentación. Veamos las características fundamentales:

-“The Big Picture”

Los ensayos para un rodaje no son tan numerosos como los ensayos teatrales. Y tiene su lógica: el “grueso” del trabajo en un montaje teatral sí son los ensayos; en cambio, el “grueso” del trabajo en una peli es el rodaje.

Aunque sean menos, uno de los objetivos fundamentales que conseguimos es ponernos de acuerdo sobre qué peli vamos a hacer. Un guion (palabra escrita) puede interpretarse de muchas formas, y el objeto de los ensayos es consensuar con el director y el resto del equipo artístico la visión general del proyecto: lo que vamos a contar y el recorrido que hace cada personaje.

Tu presentación, por supuesto, no requiere que te pongas de acuerdo con tanta gente. No obstante, te resultará muy útil tener esa idea general, esa “big picture” en la cabeza. El ensayo te ayudará a ver qué quieres contar, y si la has planteado adecuadamente.

Busca el tono adecuado para cada tramo. Foto: Billy Alexander.

-El tono adecuado.

Vista toda la peli, es hora de fijarnos en cada secuencia. Particularmente en el tono y el ritmo de cada una. Teniendo en mente el punto anterior: ¿Qué pasa en la secuencia? ¿Qué queremos transmitir? ¿Es una escena pausada o dinámica? ¿Cómica o dramática?

Haz lo mismo con cada tramo de tu presentación. ¿Expones datos, o cuentas una anécdota? ¿Es una idea en la que vale la pena que te tomes tu tiempo? ¿O la introducción a un vídeo, en la que no quieres pararte demasiado? Dar un tono y un ritmo adecuado a cada tramo es fundamental para ti y para tu audiencia. Es la mejor forma de mantener su atención, de hacer un discurso más variado y de asegurarte de que se llevan a casa lo realmente importante.

-Al menos, uno

En los ensayos de cine no se repiten una y mil veces las secuencias, como en el caso de los teatrales. Pero todos somos conscientes de la importancia de ensayar al menos una vez cada secuencia de principio a fin. Eso permite que el director pueda encajar todas las piezas en su mente, y que los actores vayamos al rodaje habiendo reproducido al menos una vez todas las intervenciones del personaje.

Si los puntos anteriores tienen su importancia, este es fundamental. Y es que reproducir todo el recorrido de tu presentación va a marcar una enorme diferencia. No basta con imaginarlo, o con hacer un repaso rápido de los contenidos: debes encontrar el tiempo para hacer toda la presentación al menos una vez. Te dará confianza, seguridad, te permitirá ver si todo lo que te has imaginado encaja, si tu mensaje llega con claridad, practicar la entrada de los visuales… Es una vuelta de reconocimiento a toda tu presentación, como en la Fórmula 1. Podrás prever cada tramo. No sólo dónde es mejor frenar o dónde puedes pisar a fondo: estarás mucho más preparado para reaccionar a los imprevistos (y siempre los hay). Y, sobre todo, reducirá a la mitad tu nivel de estrés.

Ensaya para reducir tu estrés a la mitad. Foto: Bob Smith.

Recapitulando, ensayar te permitirá:

  • Verificar que el planteamiento general funciona (“The big picture”)
  • Mantener la atención
  • Hacer un discurso más expresivo y variado
  • Asegurarte de que se llevan a casa lo importante
  • Ganar confianza y seguridad
  • Prever lo que viene a continuación
  • Reaccionar mejor ante cualquier imprevisto
  • Reducir el nivel de estrés

Y todo, por el módico precio de dejar a un lado la pereza, y dedicar un poco de tiempo a los ensayos. ¿No te parece más que razonable por hacer una presentación de cine?

“A más ver…”